sábado, 9 de enero de 2010

Madre de Dios


Cabellos rojizos, piel seca, altos femures, habiles y dueños.

Recuerdo ese año 2006, todo pasaba tan rapido, las vidas, las nubes, y el dolor. Lllegando a Madre de Dios sofocado por la naturaleza, casi odiando al Sol, gran Rey êl. Como era de esperarse un recibimiento calido y muy honroso, sonrisas, risas, pisadas polvorientas.

Tras horas de caminatas y ya establecidos comienzo a tomar conciencia, donde estoy, esto es el paraiso. Es asi de caliente el Paraiso? Es asi de contaminado? Es asi de inmunda la gente que lo alberga? Es necesario hacerle esto?

Que derecho se tiene para talar indiscriminadamente, eliminar mercurio en panzas de peces gloriosos cual excusado gratuito, tapar al ya muchas veces odioso sol con su calor infernal-con cochinada- , nativos escondidos como si se tratasen de enemigos, de perfectos desconocidos.

Cada mañana una nueva experiencia, que nunca igualaran maquinas, fibra optica, wireless, 3g, etc. Ruidos inagotables, hermosos en su textura y color. Animales.

Cabe recordar que no somos mas que intrusos.

"El orden de nosotros, es el desorden de la naturaleza" - Victor Zambrano.

Fotografia: http://www.elmundo.es/elmundo/2007/10/03/ciencia/1191429640.html

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